Iba a escribir una situación chitosa, pero hoy me levanté un poquito existencialista, no sé por que. En estos días me daban ganas de escucha Pink Floyd - sin duda el grupo del cual más conozco -, pero ahora escucho a Bunbury. Debería hacer música así, de esas que relajan a las personas, pero me gustan las guitarras eléctricas =/. De todos modos escribiré la situción chistosa, pero antes escribiré cosas como las que solía escribir antes.
Sócrates murió por lo que creía, al igual que muchos hombres que han habitado este mundo. De hecho muchos creen que la figura de Jesucristo se inspiró en el viejo filósofos griego. Puede ser factible si se considera todas las influencias que tomó la iglesia primigenia para atraer a más fieles paganos. Pero el asunto que me provoca sensaciones encontradas tiene que ver con la vida de Sócrates mismo. Al igual como lo hizo Nietzsche yo también le he atacado mucho por defender siempre a los sofistas. Mas debo entender en Sócrates una actitud natural de todo hombre: tener certezas en la vida para sentirse bien y no atormentarse.
Ya en el prólogo de cierta edición de las "Meditaciones metafísicas" de René Descartes aparece la siguiente sentencia:
"Mas el hombre no puede vivir sin filosofía; porque cuando le falta una convicción básica en que apoyar sus plantas, siéntese perdido y como naufrago en el piélago de la incertidumbre".
Aquí la palabra filosofía significa algo así como convicciones básicas como un credo religioso o secular. Hubo precisamente, una época hacia los últimos años del siglo XIX de nuestra era que el historicismo hace su aparición recordando a los fantasmas de los viejos sofistas: verdades y valores poseen únicamente validez relativa (sólo poseen sentido una vez intergrados al organismo total de la propia cultura). Esto tomó aún más mayor fuerza en el ámbito de las ciencias. Y el "hombre medida de las cosas" comenzó a atormentar a la humanidad en dicho terreno. Se resquebrajó la ingenua confianza positivista. Por ejepmlo, ¿poseen las leyes científicas validez universal? ¿Son meras convenciones propias de seres herederos de la veritatofagia socrática? El historicismo había llevado a la filosofía al relativismo e incluso al escepticismo. Increíblemente para mí hubo una época en la cual se estaba cambiando la figura de Sócrates como el Adán de la filosofía por la de Protágoras el Caín del pensamiento.
No creo que esto suceda mientras yo viva... El gran valor de Sócrates fue su sacrificio por la filosofía, por "corremper a la juventud" como se le enjuició. Pero su objetivo no era más que iluminarnos a nosotros, jóvenes estudiantes de Filosofía.
No obstante pareciera que tal sacrificio fue en vano si tomamos el siguiente ejemplo de una conversación entre dos alumnos de Filosofía contemporáneos. Para mantener en incógnita sus identidades mencionaremos sólo sus nombre: Un tal Ricardo y un tal Daniel.
Ricardo: -¿Oye mañana nos toca con el Piante?
Daniel: - Sí wm.
Ric. - ¿Había que leer algo?
Dan. - No sé, parece que algo de Foucault, pero toi tan pajero este segundo semestre que seguro no leo niuna wa.
Ric y Dan. - jjjajajjajajjaja.
Ric. - En too caso no voi a leer na wm, toi xato.
Dan. - Sí po watxo, esa pregunta no se hace.
Ric. - jjjajajja esa es una pregunta retórica.
Sócrates murió por lo que creía, al igual que muchos hombres que han habitado este mundo. De hecho muchos creen que la figura de Jesucristo se inspiró en el viejo filósofos griego. Puede ser factible si se considera todas las influencias que tomó la iglesia primigenia para atraer a más fieles paganos. Pero el asunto que me provoca sensaciones encontradas tiene que ver con la vida de Sócrates mismo. Al igual como lo hizo Nietzsche yo también le he atacado mucho por defender siempre a los sofistas. Mas debo entender en Sócrates una actitud natural de todo hombre: tener certezas en la vida para sentirse bien y no atormentarse.
Ya en el prólogo de cierta edición de las "Meditaciones metafísicas" de René Descartes aparece la siguiente sentencia:
"Mas el hombre no puede vivir sin filosofía; porque cuando le falta una convicción básica en que apoyar sus plantas, siéntese perdido y como naufrago en el piélago de la incertidumbre".
Aquí la palabra filosofía significa algo así como convicciones básicas como un credo religioso o secular. Hubo precisamente, una época hacia los últimos años del siglo XIX de nuestra era que el historicismo hace su aparición recordando a los fantasmas de los viejos sofistas: verdades y valores poseen únicamente validez relativa (sólo poseen sentido una vez intergrados al organismo total de la propia cultura). Esto tomó aún más mayor fuerza en el ámbito de las ciencias. Y el "hombre medida de las cosas" comenzó a atormentar a la humanidad en dicho terreno. Se resquebrajó la ingenua confianza positivista. Por ejepmlo, ¿poseen las leyes científicas validez universal? ¿Son meras convenciones propias de seres herederos de la veritatofagia socrática? El historicismo había llevado a la filosofía al relativismo e incluso al escepticismo. Increíblemente para mí hubo una época en la cual se estaba cambiando la figura de Sócrates como el Adán de la filosofía por la de Protágoras el Caín del pensamiento.
No creo que esto suceda mientras yo viva... El gran valor de Sócrates fue su sacrificio por la filosofía, por "corremper a la juventud" como se le enjuició. Pero su objetivo no era más que iluminarnos a nosotros, jóvenes estudiantes de Filosofía.
No obstante pareciera que tal sacrificio fue en vano si tomamos el siguiente ejemplo de una conversación entre dos alumnos de Filosofía contemporáneos. Para mantener en incógnita sus identidades mencionaremos sólo sus nombre: Un tal Ricardo y un tal Daniel.
Ricardo: -¿Oye mañana nos toca con el Piante?
Daniel: - Sí wm.
Ric. - ¿Había que leer algo?
Dan. - No sé, parece que algo de Foucault, pero toi tan pajero este segundo semestre que seguro no leo niuna wa.
Ric y Dan. - jjjajajjajajjaja.
Ric. - En too caso no voi a leer na wm, toi xato.
Dan. - Sí po watxo, esa pregunta no se hace.
Ric. - jjjajajja esa es una pregunta retórica.
